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Trabajar desde la inclusión

El Municipio b firmó un nuevo convenio de barrido que permitirá cubrir el 100% del territorio y aportar a la inclusión social de jóvenes.

El alcalde Carlos Varela en representación del Municipio b firmó un nuevo convenio socio-educativo laboral a fin de garantizar las tareas de barrido en el 100 % del territorio del Muncipio. En esta oportunidad la ONG Juventud para Cristo es quien se hará cargo de la tarea del barrido manual de calles, trabajando de lunes a sábados, de 8 a 14 hs. 

Varela afirmó que “este tipo de convenios forman parte de una política de inclusión que lleva adelante el Municipio b en el marco de la articulación dirigida a hombres y mujeres provenientes de sectores de vulnerabilidad socio-económica”. Están enfocados, en este caso, a jóvenes de entre 18 y 29 años. Dijo que “se apunta a promover un proceso en el cual los jóvenes incorporen habilidades y destrezas que les permitan fortalecer vínculos y redes sociales favoreciendo una mejor calidad de vida para sí y los suyos, aportando a la convivencia ciudadana, todo esto mientras contribuyen a tareas concretas y tan importantes en el territorio como el barrido”. “Es una forma de contribuir desde este lugar a generar conciencia y aportar a la construcción de ciudadanía colectiva”, señaló.

Por su parte, Hugo Piriz, coordinador general de la ONG, manifestó que esta es una asociación sin fines de lucro, y que trabaja con jóvenes que se encuentran en situación de vulnerabilidad social. Opera en el país desde 1972 y fue la primera ONG en establecer convenios con la Intendencia de Montevideo, en aquel entonces con corte de césped en Camino Maldonado. Sostuvo que la misión de la ONG es promover la educación y la solidaridad, ayudando y apoyando a las personas que se encuentran en desventaja o vulnerabilidad. Expresó que es una experiencia nueva, que nunca habían trabajando en el territorio y están muy contentos con poder hacerlo.

¿Por qué apostar a la inclusión?

Richard Escobar, psicólogo que trabaja realizando el seguimiento de dichos convenios expresó que “están dirigidos a una población vulnerable y se busca que, a través de un trabajo formal, los jóvenes comiencen a adquirir hábitos de trabajo y a obtener ciertas capacidades para enfrentarse al mercado laboral”.

Jóvenes sin experiencia en trabajo formal, habiendo abandonado los estudios en primaria o secundaria, tienen la posibilidad a través de estas experiencias de adquirir herramientas para poder enfrentarse en mejores condiciones al mundo del trabajo. Así es como, muchos de ellos, a través de la adquisición de nuevos hábitos, desarrollando y profundizando vínculos en las diferentes situaciones laborales, incorporando normas de convivencia laboral, retomando estudios, etc., y a través de un proyecto educativo pueden, al finalizar su pasaje por el convenio, conseguir un empleo que les permita mejorar su situación de vida. Además asistirán a talleres educativos, condición importantísima para el logro de los objetivos mencionados.

En el transcurrir del convenio el Municipio evalúa que el proyecto educativo planteado se efectivice, que se cumplan los resultados esperados. Estos se relacionan a la culminación del año de trabajo, a la inserción laboral formal, al avance en su nivel educativo, a la integración a procesos de educación no formal, a la adquisición de nociones de sus derechos y obligaciones como ciudadanos y a la adquisición de documentación básica.

Más limpieza, seguimos avanzando

Gracias a este convenio el Municipio b llegará a cubrir el 100 % del territorio, como por ejemplo el barrio de la Aguada, ya que el resto está a cargo de la empresa CAP, que además de las acciones diarias viene llevando a la práctica el nuevo plan de limpieza implementado por el Gobierno Departamental y el Municipio b, que entre otras características tiene la instalación de nuevos contenedores y un aumento en la cantidad de frecuencias.