Avanza el ciclo de talleres que buscan recoger la mirada de las niñas y los niños en torno a sus barrios y construir junto a ellos y ellas territorios más amigables con las infancias.
Durante los encuentros, se trabajó con niños y niñas de 5to y 6to año de las escuelas Nº 131 República de Chile y Nº 16 Suecia, respectivamente, para reflexionar sobre cómo hacer de los entornos un lugar más habitable para la convivencia
En esta segunda instancia, la consigna consistió en trabajar sobre un mapa que da cuenta del recorrido por el barrio realizado en el taller anterior, marcando los puntos que se visitaron alrededor de la escuela. Para esto, se utilizaron íconos basados en cuatro ejes: ¿Qué hay en el espacio?, ¿qué dificultades o aspectos negativos vemos en el entorno urbano?, ¿qué sensaciones nos despierta? y ¿cómo podemos mejorarlo?
Los y las niñas se dieron a la tarea de reconstruir el espacio que transitan diariamente, haciendo uso de la experiencia, apuntes y dibujos realizados en el primer taller. Con esto, se busca que los y las pequeñas exploradoras se apropien del espacio común y reflexionen acerca de temas como la accesibilidad, el cuidado del ambiente y el uso de los bienes comunes.
Estos talleres se realizan en el marco del proyecto Mi escuela, mi barrio del Municipio B, en conjunto con el Laboratorio de Urbanismo Participativo y Afectivo (LUPA) de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo, UdelaR.
Marco de la acción
Esta propuesta se enmarca el Plan de Desarrollo Municipal 2020-2025 , particularmente en los componentes “Construyendo vecindad” (compromiso Nº 74 “Inclusión de la mirada de las niñas, niños y adolescentes en el diseño y ejecución de actividades y nueva infraestructura”) y “Ganar la Calle” (compromiso Nº78 “Generación de infraestructura -estaciones de descanso, señalética, semáforos, rampas, veredas, baldosas con botones - que favorezcan la circulación, la accesibilidad y la seguridad en el habitar la ciudad” y Nº 84 “Desarrollo de proyecto que atiendan la perspectiva de la infancia y la adolescencia como “ciudad de los niños y las niñas” en el Municipio”).