Construida originalmente como vivienda unifamiliar, a fines del siglo XIX, fue ampliada y reciclada entre 1985 y 1989.
Su lenguaje ecléctico se manifiesta en una decoración goticista, a efectos de adecuarla a las funciones políticas reanudadas en 1985, luego de la dictadura militar. La naturaleza simétrica del proyecto de la Junta Departamental de Montevideo se estructura a partir de un espacio protagónico central, donde funciona la sala de sesiones, con cuidados detalles de diseño. La continuidad de los distintos niveles se destaca con un minucioso juego, expresado a partir de la presencia de líneas horizontales metálicas.
La construcción original, de 1870, pertenece al Ingeniero Ignacio Pedralbez, mientras que el reciclaje es obra de los arquitectos Roberto Monteagudo, Horacio Herbert y Manuel Aguado. La arquitectura actual comunica los valores de transparencia, permeabilidad y representatividad, adecuados a la nueva función del edificio.