Back to top

Palabras del Alcalde - Revista Vecinal Nº 1

Ciudad Vieja, Cordón, Palermo, Barrio Sur, Centro, Parque Rodó, parte de Tres Cruces, La Aguada y La Comercial… Son los barrios que constituyen el Municipio B. Aquí nació el candombe, está la puerta y puerto de entrada de Montevideo, el lugar dónde comenzó a desarrollarse la ciudad, y donde la feria de Tristán Narvaja serpentea por las calles del Cordón... todo esto y mucho más tenemos en nuestra casa.

Estamos ante un territorio pequeño pero densamente poblado y heterogéneo en su composición. Viven más de 140 mil habitantes y una población flotante, que duplica este número, que pasa buena parte de su tiempo en nuestro territorio por cuestiones laborales, de estudio u otras; a lo que se suman los turistas que tienen como cita obligada algún punto de nuestro Municipio.

Lo importante será en este quinquenio poder instalar, más allá que es un proceso dinámico, cuales son las áreas de competencia del tercer nivel de gobierno y el papel del Alcalde en cada caso. Logrando que exista un empoderamiento ciudadano del proceso a partir de sentir que estamos ejerciendo efectivamente un gobierno de cercanía.

En ese sentido, las competencias y las tareas a las que estamos convocados trascienden las enumeradas en los decretos y las resoluciones departamentales. Si queremos construir un vínculo nuevo, de relación del vecino y la vecina con el Estado, debemos estar presentes en lo que son sus preocupaciones cotidianas.

Así, los temas de seguridad, población en situación de calle, fincas abandonadas, entre otros, nos demandan estar aportando, poco o mucho, pero siempre con la premisa que a los problemas hay que encontrarle soluciones. Al mismo tiempo de controlar el cumplimiento de la ejecución de una obra de vialidad, como la calle 25 de Mayo, en la Ciudad Vieja; llegar al barrido del 100 por ciento de nuestro territorio (en convenio con Tacurú), o planificar abatir el atraso en el tratamiento del arbolado y realizar planes especiales dado la centralidad que representamos (barrio de Las Artes), o recuperando los espacios públicos para disfrute colectivo, entre otros...

También se articulan apoyos para actividades sociales, deportivas y culturales. Asimismo hay acciones puntuales de un impacto positivo para el territorio. Por ejemplo, tapiar una finca en pleno Barrio Sur que era usada como “boca” de pasta base; o ser parte de un gran colectivo interinstitucional para dar por terminada la larga y triste historia en la ex COMAEC, ubicada en Bv. Artigas y Maldonado.

No está de más decir nuevamente que somos parte de un colectivo, que cada acción no es producto de la actuación individual de uno, nunca es así, y que contamos con el apoyo invalorable de cada uno de los funcionarios municipales de los Centros Comunales Zonales 1 y 2, del Municipio y de muchas vecinas y vecinos. Cuanto más seamos pensando, planificando y actuando a favor del interés colectivo lograremos avanzar cada vez más y construir “nuestro lugar para vivir”.